Me llamo Xiomara. Resido en la ciudad de Mérida en Venezuela y acudo a esta vía para solicitar tu apoyo en una operación que debo practicarme en el menor tiempo posible. En el año 1996 me fue diagnóstica una condición artrítica reumatoidea deformante, y para ello el médico que me atendía me indicó usar un medicamente llamado Cloroquina. Este medicamento se suponía podría detener el avance de dicha enfermedad. Lo cierto es que durante 10 años estuve administrándome este fármaco y para el año 2006 comencé a notar una deficiencia en mi visión. Luego de una serie de estudios, se logró verificar que la Cloroquina había afectado seriamente mi retina, dañando por completo mi visión central. Aprendí a defenderme con la visión periférica y seguí desenvolviéndome en la vida. Pero hace unos 8 años comenzó a aparecerme unas cataratas que me están obstruyendo la poca visión que tengo. Una operación de cataratas en teoría es algo sencillo y hasta en los hospitales públicos la realizan, pero dadas mis condiciones y antecedentes médicos, esta operación debe ser realizada por un especialista en retina, que comprenda a cabalidad mi condición y pueda efectuar la operación sin dañar el escaso campo visual que tengo. Deseo seguir luchando. Deseo continuar mi vida sin mayores trabas que las que ya he aprendido a superar. Deseo valerme por mí misma y seguir realizando las acciones diarias que toda persona realiza a veces sin meditar en ello. No cuento con los recursos para atender esta operación en la clínica y con el médico que está dispuesto a operarme, por ello acudo a ustedes para ver si puedo intervenirme en el menor tiempo posible y evitar así que tenga una discapacidad visual completa que me impida seguir viendo a mi alrededor
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